Las formas volcánicas se vinculan con las clases de lavas o cenizas que contribuyen a su formación y el nivel de presencia de gases en el material que sale. En las zonas donde convergen dos placas, la lava es muy viscosa y tiende a acumularse alrededor del orificio de salida, dando origen a conos altos. Donde las placas divergen, la lava es más fluida; al salir, la lava tiende a alejarse del orificio de salida y origina conos anchos y en relación poco altos.
Algunas de las formas volcánicas son:
Volcán compuesto:
Formado por capas alternadas de cenizas y lava viscosa, que se enfría rápidamente. Corresponden a los conos volcánicos más altos.
Conos de cenizas: Tienen forma cónica muy marcada. Su tamaño crece porque se agradan sucesivas capas de cenizas.
Escudos volcánicos:
Se forman en zonas donde la lava es muy fluida y fluye, cubriendo una extensa superficie. Mesetas de lava:
La lava muy fluida sale por fisuras de la corteza terrestre. Al enfriarse forma grandes mesetas de basaltos.
Conos Complejos: Formados por un cono volcánico que se forma en el cráter de otro con volcánico.
jueves, 18 de septiembre de 2008
Tipos de materiales de una erupción
El material que sale a la superficie terrestre, puede ser de tres tipos:
LAVA:
Es la fracción líquida de la erupción. Según sea la fluidez, dará origen a relieves diferentes. La lava ácida solidifica rápidamente, tiene escasa movilidad y, por lo tanto, origina volcanes muy cónicos. Es decir, que son más altos que anchos en su base. Al solidificarse tan rápido, impiden la salida de los gases, lo cual origina erupciones muy violentas. La lava básica, al ser pobre en sílice, es muy fluida. Se solidifica muy lentamente, dando, por lo tanto, conos volcánicos que tienen poca altura en relación con su ancha base. Estos volcanes, denominados en escudo, son típicos de las islas Hawai. En ambos casos al solidificarse, la lava da origen a las rocas Ígneas efusivas o volcánicas. Características de las coladas de lava Una colada de lava básica presenta rugosidades u ondulaciones en su superficie, debido a que se forma una costra plástica que es deformada por el material fluido que circula por debajo. Cuando la lava presenta esta característica, se la denomina lava cordada o pahoehoe. Una colada de lava ácida presenta una gruesa costra solidificada que se quiebra por los esfuerzos del material fluido que circula por debajo. En este caso la lava se denomina lava en bloque o aa. Si las lavas básicas corresponden a una erupción submarina, como es el caso de las dorsales, la misma se solidifica con rapidez y adquiere el aspecto de masas más o menos redondeadas, adheridas entre sí. En este caso se denomina lava almohadillada o pillow-lava. Los mantos de lava básica pueden presentarse en forma de columnas poligonales paralelas y perpendiculares a la base y al techo de la colada, debido a la contracción durante el enfriamiento. En este caso se las denomina lava columnares. PIROCLASTOS:
Corresponden a la fracción sólida de la erupción. Pueden formarse ya sea a partir de grumos de lava, que son expelidos por la erupción y que se solidifican en contacto con la atmósfera, o bien por fragmentos de rocas más antiguas, que son despedazadas durante la erupción. Estos materiales piroclásticos, según sea su tamaño, cubren superficies extensas y alejadas del volcan. Cuando se depositan, dan origen a rocas sedimentarias piroclásticas. Clasificación de los piroclástos según su tamaño Bombas volcánicas: Poseen diámetros mayores de 64mm. Son pedazos o grumos de lava que se solidifican mientras son proyectados hacia arriba por la explosión y caen en estado sólido. Según sea su forma y las características de su superficie se clasifican en: bombas en corteza de pan, en forma del huso, etc.
Bloques: Poseen diámetros menores de 64mm. Son trozos de rocas despedazadas por la erupción y presentan formas angulares.
Lapilli: Son trozos con tamaños entre 2 y 64mm.
Ceniza o polvo volcánico: Con dimensiones menores a 2mm, las cenizas son transportadas a mayor altura, por la violencia dela erupción. Las corrientes de aire de la atmósfera las mantienen en suspensión y las alejan del lugar de su formación.
GASES:
Corresponden a la llamada fracción gaseosa. El más importante es el vapor de agua, que puede ser originario del magma o provenir de aguas subterráneas, que se evaporan en contacto con el material caliente. Otros gases, como el dióxido de carbono, también se liberan rápidamente. Se calcula que el vulcanismo es la principal causa de su existencia en la atmósfera. También se liberan el dióxido de nitrógeno y el azufre, que originan las lluvias ácidas naturales, el cloro, etc. Como manifestaciones gaseosas del vulcanismo, se pueden mencionar las fumarolas, mofetas y solfataras.
Otras formas características son las fuentes termales, que corresponden al agua de lluvia que, al infiltrarse, se calienta en contacto con el material ígneo, se mineralizan y resurge con determinadas características. Son utilizadas en diferentes terapias curativas.
Un fenómeno muy conocido es el de los géiseres. Se producen cuando el agua subterránea se calienta hasta el punto de ebullición y el vapor que se forma se proyecta por un orificio hasta la atmósfera, junto con algo de agua y sales disueltas. Estas sales se depositan y pueden dar origen a la formación de azufre.
LAVA:
Es la fracción líquida de la erupción. Según sea la fluidez, dará origen a relieves diferentes. La lava ácida solidifica rápidamente, tiene escasa movilidad y, por lo tanto, origina volcanes muy cónicos. Es decir, que son más altos que anchos en su base. Al solidificarse tan rápido, impiden la salida de los gases, lo cual origina erupciones muy violentas. La lava básica, al ser pobre en sílice, es muy fluida. Se solidifica muy lentamente, dando, por lo tanto, conos volcánicos que tienen poca altura en relación con su ancha base. Estos volcanes, denominados en escudo, son típicos de las islas Hawai. En ambos casos al solidificarse, la lava da origen a las rocas Ígneas efusivas o volcánicas. Características de las coladas de lava Una colada de lava básica presenta rugosidades u ondulaciones en su superficie, debido a que se forma una costra plástica que es deformada por el material fluido que circula por debajo. Cuando la lava presenta esta característica, se la denomina lava cordada o pahoehoe. Una colada de lava ácida presenta una gruesa costra solidificada que se quiebra por los esfuerzos del material fluido que circula por debajo. En este caso la lava se denomina lava en bloque o aa. Si las lavas básicas corresponden a una erupción submarina, como es el caso de las dorsales, la misma se solidifica con rapidez y adquiere el aspecto de masas más o menos redondeadas, adheridas entre sí. En este caso se denomina lava almohadillada o pillow-lava. Los mantos de lava básica pueden presentarse en forma de columnas poligonales paralelas y perpendiculares a la base y al techo de la colada, debido a la contracción durante el enfriamiento. En este caso se las denomina lava columnares. PIROCLASTOS:
Corresponden a la fracción sólida de la erupción. Pueden formarse ya sea a partir de grumos de lava, que son expelidos por la erupción y que se solidifican en contacto con la atmósfera, o bien por fragmentos de rocas más antiguas, que son despedazadas durante la erupción. Estos materiales piroclásticos, según sea su tamaño, cubren superficies extensas y alejadas del volcan. Cuando se depositan, dan origen a rocas sedimentarias piroclásticas. Clasificación de los piroclástos según su tamaño Bombas volcánicas: Poseen diámetros mayores de 64mm. Son pedazos o grumos de lava que se solidifican mientras son proyectados hacia arriba por la explosión y caen en estado sólido. Según sea su forma y las características de su superficie se clasifican en: bombas en corteza de pan, en forma del huso, etc.
Bloques: Poseen diámetros menores de 64mm. Son trozos de rocas despedazadas por la erupción y presentan formas angulares.
Lapilli: Son trozos con tamaños entre 2 y 64mm.
Ceniza o polvo volcánico: Con dimensiones menores a 2mm, las cenizas son transportadas a mayor altura, por la violencia dela erupción. Las corrientes de aire de la atmósfera las mantienen en suspensión y las alejan del lugar de su formación.
GASES:
Corresponden a la llamada fracción gaseosa. El más importante es el vapor de agua, que puede ser originario del magma o provenir de aguas subterráneas, que se evaporan en contacto con el material caliente. Otros gases, como el dióxido de carbono, también se liberan rápidamente. Se calcula que el vulcanismo es la principal causa de su existencia en la atmósfera. También se liberan el dióxido de nitrógeno y el azufre, que originan las lluvias ácidas naturales, el cloro, etc. Como manifestaciones gaseosas del vulcanismo, se pueden mencionar las fumarolas, mofetas y solfataras.
Otras formas características son las fuentes termales, que corresponden al agua de lluvia que, al infiltrarse, se calienta en contacto con el material ígneo, se mineralizan y resurge con determinadas características. Son utilizadas en diferentes terapias curativas.
Un fenómeno muy conocido es el de los géiseres. Se producen cuando el agua subterránea se calienta hasta el punto de ebullición y el vapor que se forma se proyecta por un orificio hasta la atmósfera, junto con algo de agua y sales disueltas. Estas sales se depositan y pueden dar origen a la formación de azufre.
Formas de salida o emisión
Si el material sale a la superficie por una fisura o grieta del terreno, nacen derrames en grandes mantos, que se alejan del lugar de emisión, cubriendo una gran superficie. La sucesiva salida de material, puede producir la formación de mesetas basálticas. Si por el contrario el material sale por un orificio, da origen a la formación de un cono volcánico, cuya forma dependerá del tipo de erupción. Por otra parte a lo largo de su historia, un cono volcánico puede variar su tipo de erupción, es decir, pasar de formas más violentas a menos violentas y viceversa.
Vulcanismo
El vulcanismo se produce cuando el material fundido del interior de la Tierra sale a la superficie a través de grietas, fisuras y orificios. A este material que sale se lo denomina lava, se caracteriza porque se enfría rápidamente y libera sus gases disueltos. Por otra parte, algunos de los minerales de alta temperatura de consolidación se forman y se separan del magma. De acuerdo a la viscosidad del material, varían las características de la erupción volcánica. El material básico, que se caracteriza por su alta temperatura, de aproximadamente 1000/1200°C, su bajo contenido de sílice, su elevada fluidez y el rápido desprendimiento de los gases, origina erupciones que no son explosivas. Por el contrario, dan origen a erupciones donde predomina la fracción líquida o lava. El material ácido, que es viscoso, muy rico en sílice, con temperaturas de aproximadamente 600°C, origina erupciones muy violentas, con gran desprendimiento de gases y de la fracción sólida.
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